En el momento de incertidumbre económica que nos está tocando vivir muchos se plantean la posibilidad de esperar a que el temporal amaine para retomar los proyectos que se tienen en mente. Pero quizás, este pueda ser un buen momento para lanzarse. Eso dependerá de acertar o no con el concepto de negocio que el mercado necesite y que dispongamos de locales adecuados a unos precios razonables. Eso sí, deberemos extremar nuestras precauciones. Antes de firmar un contrato de franquicia debemos meditar sobre nuestras intenciones respecto a ese proyecto. Yo mismo me planteo varios interrogantes. ¿Que espero de este negocio?, ¿Durante cuanto tiempo pienso estar vinculado?. El contrato de franquicia que me proponen, ¿cumple con mis expectativas?. Es por ello que el contenido de las cláusulas del contrato y en particular su duración cobran especial importancia. De hecho en alguna ocasión me he replanteado proyectos ilusionantes debido, entre otras consideraciones, a la poca duración del contrato ¿Es realmente sensato firmar un contrato de franquicia para 5 años? ¿Me pueden cambiar las condiciones del mismo a la hora de la renovación? ¿Me pueden no renovar transcurrido ese periodo? En nuestra web “aedef.com” destacamos algunas consideraciones previas a la firma de un contrato de franquicia pero dados los tiempos que corren debemos tener amarrados cuantos más puntos mejor. Quiero destacar de ellos los tres que considero capitales:
- El tiempo necesario para la recuperación de la inversión y la duración prevista en el contrato. No debemos embarcarnos en un proyecto que de entrada, o si la cosa nos va regular, lo único que nos permita sea la recuperación de la inversión. El asunto nos bebe permitir recuperarla y además, disponer de unos cuantos años para obtener los beneficios esperados y en las cláusulas de nuestro contrato tenemos que tener bien amarrada su renovación.
- La exclusividad de zona, debe estar bien definida, No deberíamos aceptar operar en un mercado sino tenemos la exclusividad, dado que nuestros esfuerzos podrían verse reducidos en el futuro.
- La revisión previa del contrato con un abogado experto en franquicias es indispensable ya que las obligaciones previstas para el franquiciado suelen ser más claras que las que asume el franquiciador en caso de que algo falle.
FUENTE :Aedef